Lo que sabemos de Nike React

Hace unos meses Mark Parker anunciaba tres nuevos sistemas de amortiguación que serían presentados en el siguiente semestre. El último gran cambio había ocurrido en 2008 y desde entonces todo el mundo hablaba de la amortiguación de la competencia. Históricamente adidas se ha centrado en la estabilidad y de hecho el Boost lo desarrolló una empresa externa (BASF). Entrar en la batalla de la amortiguación era aceptar su derrota teórica, pero con Boost consiguieron saltarse todas sus reticencias. «Ah, vale, teníais razón pero nosotros nos llevamos el dinero».

El ataque de Nike llega en tres fases. La primera, VaporMax, es la más espectacular y la que menos mira al deporte. La ZoomX llegó justo desde el otro lado, en los pies de los que rozan las dos horas en maratón. React va por la calle del medio, no necesitas ser el maratoniano más rápido de la historia pero tampoco te exigen hacerte un selfi.

El nombre React le emparenta con la última época brillante de una marca hermana de Nike. En solo cinco años la imagen de Converse había envejecido hasta convertirse en una antigua gloria poco atractiva para un consumidor que veía a Magic y Bird como dinosaurios. El 3 de septiembre de 1991 Converse registraba React como marca comercial para su nuevo sistema de amortiguación que llegó a las tiendas unos meses más tarde. Durante algunos años vimos aquel React en las zapatillas de Kevin Johnson o Larry Johnson y todo el mundo quería reventar sus zapatillas para saber qué era aquella sustancia amarillenta. Fue el canto del cisne de Converse en el baloncesto, la última gran tecnología antes de darse por vencido. Como el malo de una película de terror, volvió a intentarlo un par de veces antes de que mamá Nike le apartara por completo del baloncesto.

Aquél React murió. El nuevo de Nike llega sin relación conocida con su antecesor, como un innovador compuesto que promete ligereza y durabilidad. La espuma se coloca siguiendo patrones de presión que facilitan mayor tracción donde más se necesita. Tal y como ocurrió con el Air a principios de los 80, las ventajas funcionales del React no se aprecian a primera vista, para disfrutar la durabilidad de una zapatilla deben pasar varios meses y decir que una zapatilla es más ligera es como asegurar que un detergente lava más blanco. Puede que sea real pero hay que demostrarlo. Precisamente nos atrae ese bajo perfil estético del React, ese desinterés por ser el chico mas cool del barrio. Por ahora lo vemos en dos zapatillas,  Jordan Super.Fly 2017 e Hyperdunk 2017 (la saga Hyperdunk ha tenido una relación de amor y odio con otro sistema de amortiguación de Nike, el Lunarlon). El video de presentación de Nike React es tan estético como misterioso.

Un avance de Mark Parker en marzo, una primera aparición de Draymond Green en junio y un lanzamiento que se prepara para agosto. Nike controla los plazos y la información para ponernos los dientes largos.

 

7 pensamientos en “Lo que sabemos de Nike React

        1. sz9

          BASF desarrolló una tecnología que presentó a adidas y Puma, uno lanzó Boost y el otro NRGY, pero están de batallas legales.

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