Por qué Steve Prefontaine es TAN importante

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Hoy, 30 de mayo, se cumplen 41 años de la muerte de Steve Prefontaine, un corredor que llevó Nike durante solo un par de años pero dejó su impronta en la marca como estilo a imitar. Pero no solo fue importante para Nike, también lo fue para el deporte y no solo porque consiguieran establecer siete plusmarcas estadounidenses.

Hasta bien entrados los ochenta el deporte estaba anclado en la visión caballeresca creada por los gentleman británicos del XIX. El deporte debía ser una actividad honorable que estaba muy lejos del sentir de la plebe. Esa plebe que durante siglos había competido en carreras o en cientos de juegos. El deporte era otra cosa, era lo que hacían los hombres de buena familia, gente que creaba normas adaptadas a las nuevas condiciones.

Una de esas reglas obligaba a los deportistas a no percibir compensación económica ni relacionarse en ningún modo con alguna empresa deportiva. Ni siquiera los profesores de educación física podían considerarse verdaderos deportistas según estas normas. Los Juegos Olímpicos eran el ejemplo perfecto de ese nuevo deporte. En 1904 se celebraron unos llamados Juegos Antropológicos en los que participaban atletas de todas las razas. Los Juegos Olímpicos estaban reservados para blancos. El idolatrado Pierre de Coubertain, organizador de los primeros juegos, cesó en su cargo de presidente del Comité Olímpico Internacional cuando le obligaron a aceptar a las mujeres en los Juegos. Y sobre todo, los deportistas no podían cobrar. Jim Thorpe, que para muchos es el mejor atleta de todos los tiempos, tuvo que devolver sus medallas olímpicas en decatlón y pentatlón después de que se diera a conocer que había cobrado dos dólares por jugar algunos partidos de béisbol.

En los años setenta el deporte generaba tanto dinero que los deportistas comenzaron a exigir su parte. El tenis y el golf habían creado torneos Open (abiertos a amateurs y profesionales) y el atletismo quiso seguir su ejemplo. Steve Prefontaine no fue el primero pero sí el más visible de los atletas que se negaban a aceptar el amateurismo. Aceptó un puesto en Nike como «National Director of Public Affairs». Cuando a Phil Knight, fundador de Nike, le preguntaron qué significaba, respondió «exactamente significa Corro Mucho».

Prefontaine organizó una gira por Europa para alejarse de la organización encargada de regir el atletismo norteamericano, la AAU (Amateur Athletic Union). Llegaron a tapar las siglas de la organización en los escudos de sus camisetas. Durante un tiempo, Steve Prefontaine incluso dejó el deporte para trabajar poniendo cervezas. Era su modo de quejarse por no poder vivir de lo que consideraba su profesión.

Nike apoyó el espíritu rebelde de Prefontaine. Sabía que debía pagarle como hacían todas las marcas desde 1956, pero querían también usarle en sus campañas. En la Europa del Este los deportistas eran funcionarios o militares. El deporte era cuestión de Estado. En el 77 Nike contraatacó creando un club que pagaba a sus atletas. El mismo nombre del equipo, Athletic West, dejaba bien claro que era una respuesta al falso amateurismo comunista.

Legalmente, hasta 1992 los jugadores de baloncesto profesionales no pudieron participar en los Juegos Olímpicos y aun hoy se establecen cortapisas para futbolistas o boxeadores. Hasta entonces los pagos, conocidos por todos, eran escondidos y disimulados. Prefontaine quería ganar dinero por hacer lo que más le gustaba. Pero sobre todo quería acabar con una imagen del deporte que tenía poco que ver con la situación real.

2 pensamientos en “Por qué Steve Prefontaine es TAN importante

  1. blackrabbot

    no acabo de pillar lo de falso amateurismo comunista. Si eran funcionarios, donde estaba el amateurismo? lo de nike lo veo más una respuesta al sistema de los EEUU, para poder equipararse a los comunistas

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    1. sz9

      Oficialmente los deportistas del otro lado del telón de acero eran funcionarios o militares. En realidad, lo que hacían era darle un cargo y un sueldo estatal pero le daban total libertad para que entrenaran. Así seguían manteniendo el estatus de amateur. Además, todos los deportistas de países comunistas (excepto China) estaban obligados a llevar adidas, así que para adidas era un negocio redondo. Athletic West era una respuesta a eso ¿los comunistas pagan a sus atletas? Pues en el Oeste haremos lo mismo.

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